Victor von Muerte es hijo de Werner y Cynthia, gitanos Zefiro, y nació en Latveria, un pequeño país gobernado por el Rey Vladimir Vassily Gonereo Tristan. Victor apenas conoció a su madre, una bruja que había invocado al demonio Mefisto para adquirir poder, que estalló fuera de control momentos antes de que un soldado acabara con ella. Antes de morir, le pidió a Werner que protegiera a Victor de Mefisto. Werner era un doctor, el cual fue obligado a atender a la esposa del Rey Vladimir. Cuando Werner fue incapaz de curar su cáncer, Vladimir le culpó de la muerte de su esposa, y el doctor tuvo que huir de Latveria con Victor. Werner falleció debido al extremo frío, mientras protegía a su hijo. Antes de morir, Werner entregó a Victor al cuidado de su mejor amigo, Boris, intentando antes de morir advertirle acerca de las dificultades a las que se enfrentaría en su vida. Al descubrir los artefactos místicos de su madre, Victor se auto enseñó en el campo de la hechicería. Fue entonces cuando comenzó una competición anual contra Mefisto, con la intención de liberar el alma de su madre. Cuando llegó a la adolescencia, ya se había convertido en un genio científico, y utilizó sus inventos para librar una guerra independiente contra la monarquía de Latveria. Su brillante inteligencia llegó a ser conocida incluso en América, y se le concedió una beca para que asistiera a la Universidad New York State. Aunque Victor se había enamorado de la nieta de Boris, Valeria, decidió dejarla atrás con la obsesión de amasar nuevos conocimientos, que usaría para su venganza contra los que le habían oprimido.
Al llegar a la universidad, fue bienvenido por Reed Richards, otro estudiante que deseaba ser su compañero de cuarto, pero Victor rechazó su oferta de amistad. Durante sus días universitarios, Victor desarrolló una rivalidad con Richards, siempre convencido de que su intelecto era superior. Fue entonces cuando creó una maquina diseñada para poder rescatar el alma de su madre del otro mundo. Richards intentó advertirle de un fallo en sus cálculos, pero el orgullo de Victor provocó que se negara a escucharle. Al activar la maquina, se produjo una explosión que golpeó directamente a su rostro. Expulsado de la Universidad, Victor comprobó como en su rostro habían quedado ciertas cicatrices que habían arruinado su aspecto. Abandonó América, y se internó en el Tíbet, donde inició la búsqueda de una nueva iluminación. Allí encontró a Genghis, uno de los enigmáticos Nueve Inmortales. El senil hechicero le dirigió a una antigua y perdida orden de monjes. Victor los convirtió en sus sirvientes, y les hizo forjar su primera armadura, diseñada para ocultar su aspecto. Victor hizo que presionaran la máscara al rojo vivo sobre su rostro, desfigurando completamente su ya dañado rostro. Con el apelativo de Doctor Muerte, conquistó Latveria, y asesinó al Rey Vladimir, capturando a su hijo Rudolfo, y reemplazándolo por un robot con su aspecto, que le cedió la corona. Tras esto renombró la capital, Haasensdadt, como Doomsdadt. Utilizó su talento y tecnología para transformar a Latveria en un paraíso donde ningún ciudadano sufría de a
mbiciones, no había amenaza de guerra, y todos le adoraban, o sufrían las consecuencias. Muerte escogió un primer ministro, controlado por él, para dar la cara al exterior, que consideró que la existencia del dictador no era más que un mito. El conocimiento de Victor aumentó, e inventó una maquina del tiempo, así como duplicados robóticos de su mismo bautizados como Muertebots. En uno de sus primeros viajes temporales, visitó Alemania durante la Segunda Guerra Mundial, y estuvo a punto de matar a Hitler por su persecución de los gitanos, aunque optó por no cambiar el curso de la historia. A partir de entonces, Victor puso énfasis en tres objetivos: rescatar a su madre, probar su superioridad ante Reed Richards, y conquistar el mundo. En aquel entonces, Reed y sus colegas se habían convertido en los Cuatro Fantásticos. Para llamar su atención, el Doctor Muerte capturó a la Chica Invisible. Obligó al resto del equipo a viajar atrás en el tiempo para adquirir las legendarias gemas de Merlín para él, pero Reed, Mister Fantástico le engaño entregándole un cofre lleno de cadenas. Su siguiente intento consistió en forjar una alianza con Namor, el Hombre Submarino. Estuvo a punto de enviar el Edificio Baxter al Sol, pero Namor se volvió contra él. Muerte terminó perdido en el espacio, pero fue rescatado por los alienígenas Ovoides, que le enseñaron el arte de intercambiar mentes con
otra persona. Con dicha habilidad condujo a Reed a una trampa, para tomar control de su cuerpo. Sin embargo, los Cuatro Fantásticos lograron descubrir y obligarle a regresar a su verdadero cuerpo, accidentalmente enviado al Microverso. El Microverso se convirtió en un nuevo reto para el Doctor Muerte, que conquistó Mirwood, el reino de la princesa Pearla, y atrajo a los Cuatro Fantásticos para hacerles sus prisioneros. Ayudados por el Hombre Hormiga, el equipo logró escapar y perseguir a Muerte hasta la Tierra. Lucharon contra él a bordo de su fortaleza volante, y aunque frustraron sus planes, Muerte logró escapar. Intentó recuperar su fortaleza volante, custodiada en una instalación militar, pero los recientemente formados Vengadores intervinieron y se vio obligado a destruirla. Como siguiente plan, doto de poder al Trío Terrible, y los envió contra los Cuatro Fantásticos, pero también fracasaron, causando que el Doctor Muerte fuera enviado al espacio. Allí fue rescatado por el viajero temporal conocido como Rama-Tut, quién quedó tan impresionado por Muerte, que al regresar a su propia era creó la identidad enmascarada de Kang en su honor. Muerte procedió a retar a Reed en una batalla mental en la Embajada de Latveria para determinar quien poseía el mayor intelecto. Utilizaron una encéfalo-pistola, la cual enviaría al perdedor al Limbo. Muerte pareció ganar el combate, pero Reed le ha
bía hipnotizado para que así lo creyera. Al recuperarse atacó a los Cuatro Fantásticos aprovechando que habían perdido los poderes. Sin embargo fue derrotado de nuevo cuando la Cosa recuperó los suyos. Frustrado al haberse visto convertido de nuevo en monstruo para enfrentarse al villano, la Cosa aplastó las manos de Muerte dentro de sus guanteletes, dejándole huir de nuevo, aunque Victor nunca olvidaría la humillación. Al enterarse de la inminente boda de Reed y Susan, Muerte utilizó un manipulador de las emociones para enviar une veintena de villanos para impedir la ceremonia. Sin embargo los villanos fueron derrotados por los Cuatro Fantásticos y el resto de los súper-héroes invitados. Reed deshizo el ataque con su desplazador temporal, enviado a los villanos a donde habían sido convocados, y sin memoria de lo ocurrido. Tras esto, la boda tuvo lugar. Muerte siguió intentando una serie de planes como robar los poderes de Estela Plateada, los cuales perdió al intentar atravesar la barrera planetaria
impuesta por Galactus. También intentó intercambiar cuerpos con Daredevil, pero fracasó una vez más. Su obsesión con los Cuatro Fantásticos le llevó a estar a punto de sacrificar todo un pueblo de Latveria para acabar con ellos. Pasado un tiempo, Diablo intentó forzar una alianza con el Doctor Muerte, manteniendo a su antiguo amor, Valeria, como prisionera, pero fue enviado al futuro por la maquina del tiempo de Muerte. Logró salvar a Valeria, pero esta le abandonó de nuevo harta de su lamentable orgullo por derrotar a Diablo. El trono de Muerte se vio amenazado por su legítimo heredero, el Príncipe Rudolfo, que recibió la ayuda del extraterrestre el Sin Cara. Muerte también se tuvo que enfrentar a su propia creación Doomsman, así como a Cráneo Rojo, que intentaron conquistar Latveria. Pantera Negra impidió que Muerte se hiciera con el Vibranium de Wakanda, pero este se hizo con otros objetos que le ayudaron a utilizar el Cubo Cósmico para absorber el poder de Galactus. Reed logró robar el Cubo, invertir el proceso, y eliminar los eventos de la memoria de los involucrados. El Doctor Muerte se vio obligado a colaborar en una ocasión con los Cuatro Fantásticos para salvar a la Tierra de la amenaza de Mente Suprema. Cuando el Sin Cara apoyó una nueva revolución en Latveria, Muerte contrató a Luke Cage para espiar en los Estados Unidos, pero al negar a pagar sus servicios provocó que Cage le persiguiera a Latveria obligándole tras una dura lucha, a pagar el trabajo que había
realizado. Cuando los Atlantes comenzaron a caer en estado comatoso, y Reed fue incapaz de ayudarles, Namor busco la ayuda del Doctor Muerte. Para ello le ayudó contra el Doomsman, ahora llamado Andro, que había logrado controlar a los Muertebots en una nueva creada religión. A cambio, Muerte ayudó a Namor contra amenazas como el Doctor Dorcas, Tiburón Tigre, Krang y Attuma. A pesar de ello, Namor no era capaz de confiar en Muerte, lo que provocó que Muerte estropeara el traje que Namor empleaba para respirar en aquel tiempo, y amenazó con destruir Atlantis también. Namor no tuvo más remedio que ceder. Al descubrir lo sucedido con Namor, los Cuatro Fantásticos viajaron a Latveria para ayudarle, pero descubrieron que los Estados Unidos habían firmado un pacto de no agresión con Latveria. Tras sobrevivir a un intento de asesinato por el vigilante conocido como Mortaja, Muerte logró controlar a los Vengadores para que se enfrentaran a Attuma por él. Finalmente, Namor ayudó a Muerte contra Cráneo Rojo, que había asesinado a Rudolfo, y usurpado el control de Latveria. Tras esto, Muerte cumplió con su parte del trato reestableciendo la salud de los Atlantes, y Namor culminó su alianza con él. Después de esto, Muerte extendió un gas neural en la atmósfera de la Tierra para someter a toda la población a su voluntad. Su autoridad fue disputada por el mutante conocido como Magneto, y ambos lucharon, manipulando a los Campeones de Los Ángeles, los Vengadores y la Masa para luchar por ellos. Cuando el Doctor Muerte fue atacado por el Motorista Fantasma, su máscara se sobrecalentó, y se vio forzado a quitársela, respirando su propio gas neural. Esto le dejó incapaz de controlar a cualquiera afectado por el gas. Adquiriendo poder procedente de la Zona Negativa, Muerte fue
capaz de viajar al Otro Mundo, solo para ser derrotado por espíritus que se hacían pasar por sus propios padres. Dándose cuenta de que sus actos criminales habían dañado la reputación de Latveria, , Muerte planeó abdicar el trono para su hijo, que en realidad era un clon de si mismo llamado Victor von Muerte II. Pero cuando los origines de dicho heredero fueron revelados, Muerte se vio obligado a matar al clon que se había vuelto en su contra. Sin embargo, todo esto no era más que una distracción para que Muerte pudiera tomar control mental de Naciones Unidas utilizando su Complejo Solartron. Después, fue sometido a la imagen de su deforme rostro proyectado por el Solartron, lo cual terminó por volverle completamente loco. El hermano pequeño de Rudolfo, el Príncipe Zorba, reclamó el trono, pero Muerte fue liberado por Boris y logró recuperar su salud mental. Con la ayuda del Amo de las Marionetas, Muerte logró trasladar las mentes de los Cuatro Fantásticos a pequeños cuerpos sintéticos en la ciudad miniatura Liddleville. Muerte esperaba que esto impidiera que el equipo interfiriera en sus planes para recuperar el trono, pero los héroes lograron descubrir que había pasado, y escaparon. Muerte acabó quedando atrapado en un cuerpo sintético del pequeño pueblo, y perseguido por el Amo de las Marionetas furioso por el trato que había dado a su hijastra Alicia. Incapaz de recibir ayuda de los Micronautas cuando pasaron por allí, Muerte terminó siendo rescatado por uno de sus Muertebots, que devolvieron su mente a su cuerpo original. Sin embargo, el Doctor Muerte descubrió que durante su ausencia, el reinado de Zorba había sumido a Latveria en la anarquía. El Doctor Muerte logró convencer a los Cuatro Fantásticos de la desesperada situación que vivía su país, y aceptaron
ayudarle a recuperar el trono. Durante la lucha, las fuerzas de Zorba dejaron huérfano a un niño llamado Kristoff Vernard, y Muerte lo adoptó llegando a convertirle en su heredero. Muerte acabó con la vida de Zorba. Otro hombre llamado Alexander Flynn reclamó ser el verdadero hijo de Muerte, pero esto probó ser un engaño elaborado por el Rey Sombra. Tras manipular a Terrax contra los Cuatro Fantásticos, el Doctor Muerte fue desintegrado cuando este explotó en un estadillo de energía cósmica. Usando la técnica Ovoide, Muerte transfirió su mente a uno de los espectadores de la batalla, Norman McArthur, poco antes de la muerte de su cuerpo físico. Sin embargo, logró recuperar su cuerpo gracias al Todopoderoso, que le transportó instantes antes del suceso para poder participar en sus Guerras Secretas. Allí Muerte logró usurpar no solo el poder de Galactus, sino del mismísimo Todopoderoso, aunque este logró recuperarlo haciendo mella en la fragilidad humana del villano para controlar todo ese poder. De regresó en la Tierra, logró conquistarla haciendo uso de los poderes de control mental del Hombre Púrpura. Aunque logró solucionar todos los problemas del planeta, encontró la falta de retos frustrante, y durante un conflicto con los Vengadores y Namor, perdió el control obtenido. Durante el tiempo en el que fue dado por muerto, los Muertebots activaron un plan de contingencia, lavando el cerebro de Kristoff Vernard para que se creyera Muerte. Kristoff gobernó Latveria, pensando que era Muerte atrapado en el cuerpo de un niño, lo cual desequilibró aún más su mente. Eventualmente, y tras una aventura temporal, el Doctor Muerte regresó para reclamar el trono, derrotando
a Kristoff. Poco después de esto, ayudó a curar a Miss Marvel, Sharon Ventura, que se había convertido en otra Cosa. Muerte la manipuló para espiar a los Cuatro Fantásticos, pero esta terminó volviéndose contra él. Como castigo la convirtió en una criatura incluso más grotesca de lo que era. Una de las derrotas más humillantes fue a manos de la Chica Ardilla que envió a sus ardillas para que masticaran los circuitos de su armadura, El orgullo de Muerte hacia que este atribuyera muchas de sus derrotas a los Muertebots, a los que utilizó durante la Alianza de Actos de Venganza perpetrada por Loki. Muerte también ha utilizado al Editor para revisar constantemente la historia de Latveria en su propio beneficio. Una de sus mayores victorias llegó cuando, con ayuda del Doctor Extraño, logró rescatar el alma de su madre Cynthia de las garras de Mefisto. Tras hacerse con las energías cósmicas del vigilante llamado Aron, Muerte fue seriamente herido por el poder del extraterrestre llamado Hunger. A punto de fallecer, intentó llevarse a Mister Fantástico con él, y ambos murieron aparentemente desintegrados. Sin embargo, resultó que el poderoso Hypertormenta los había teletransportado. Durante mucho tiempo ambos fueron dados por muerto, hasta que fueron rescatados de su prisión por los Cuatro Fantásticos y un Kristoff que ya era consciente de su identidad verdadera. De regr
eso en la Tierra, Muerte volvió a sufrir otra muerte aparente junto a los héroes de la Tierra cuando estos se enfrentaron a Onslaught. Sin embargo fueron llevados a la Contra-Tierra por Franklin Richards, donde revivieron sus orígenes. Cuando todos recuperaron sus recuerdos, Muerte ayudó a que pudieran regresar a su mundo a través de la Zona Negativa. Pero cuando intentó fugarse con Franklin, Muerte fue atacado por Thor, y enviado de vuelta a la Contra-Tierra. Allí no tardó en conquistar el planeta gracias a la ausencia de oposición de los héroes, que había regresado a casa. Reclutó a Dorma, Divinidad, Lancer, Shakti y Technarx como sus tenientes. Con ellos logró una gran victoria sobre el Celestial Durmiente, que intentó conquistar la Contra-Tierra. Durante un tiempo, gobernó el planeta, y el pueblo de Latveria de su Tierra original mediante la proyección de hologramas, aunque eventualmente regresó definitivamente a su planeta original, dejando a Lancer para que gobernara la Contra-Tierra. En un plan osado, utilizó el poder de un Cubo Cósmico defectuoso para fusionar dos realidades alternativas, creando una en la que era Emperador, siendo la mutante Tormenta su reina. Como todos, sus planes, el poder le fue arrebatado, y la realidad se reestableció. Cuando Thor lideró una invasión no autorizada de Slokovia, país vecino de Latveria, Muerte ayudó a los Vengadores contra su aliado, manipulando los eventos para lograr anexar el país a Latveria. Muerte ayudó más adelante a Reed y Susan durante el nacimiento de su hija Valeria, que recibió ese nombre en honor al antiguo amor del villano. Sin embargo este acto de ayuda no era desinteresado y formaba parte de un plan mayor. Sabiendo que era su
perior a Reed en el campo de la magia, Muerte forjó una alianza con el demonio Haazareth, a quién sacrificó su mayor amor, Valeria. El poder de Haazareth aumentó de tal forma que se convirtió en amenaza para el mismísimo Doctor Extraño. A partir del cuerpo de su antiguo amor, Muerte creó una nueva armadura, y convirtió a Valeria Richards en su familiar. Utilizó entonces todo su poder místico contra los Cuatro Fantásticos, con una ira sin precedentes. Les torturó, y envió a Franklin al infierno. Una vez más, Reed fue capaz de derrotarle haciendo uso de la magia, y engañando a Muerte para que reconociera ser superior al mismo Haazareth en frente de él. El demonio reaccionó llevando a Muerte consigo al infierno, pero la batalla dejó a Franklin traumatizado, y a Reed con una cicatriz en el lado izquierdo de su rostro. Decidido a encontrar una solución final para Muerte, Reed creó una dimensión Mobius para que le sirviera de prisión. Muerte logró escapar tomando control mental de los Cuatro Fantásticos, pero fue forzado a regresar a su cuerpo. Cuando el reino de Asgard sucumbió al Ragnarok, las fuerzas místicas que se liberaron en el proceso lograron liberar a Muerte, que reclamó el trono de Latveria. Intentó entonces reclamar el martillo de Thor, que
había caído en la Tierra, pero no logró superar el encantamiento que obligaba a ser digno para empuñarlo. Poco después, Muerte fue atacado por los Vengadores cuando un satélite de Latveria que contenían peligrosos simbiontes, cayó sobre Nueva York. El Doctor Muerte, intentó reclutar criaturas de Morgan Le Fay para que le ayudaran, pero los Vengadores lograron derrotar, y entregarle a las autoridades de SHIELD. Fue liberado por Fantastic Force, un grupo procedente de un futuro distante. Estos capturaron también a la Antorcha Humana para utilizar a ambos como fuente de poder para un mecanismo de viaje temporal, construido a partir del cuerpo muerto de Galactus. Todo el plan había sido ideado por la Mujer Invisible del futuro, pero cuando se encontró un hogar para los refugiados del futuro, Muerte y la Antorcha fueron liberados. Sumido en la ira, Muerte asesinó a la Mujer Invisible del futuro. Tras el intento de invasión por parte de los Skrulls, Muerte se convirtió en miembro del Cabal Oscuro junto a Norman Osborn, Emma Frost, Namor, Loki, y Hood. Debido al estatus de Muerte, Drácula le solicitó un pacto de no agresión antes de atacar Gran Bretaña. Poco después, Muerte fue atacado por Morgan Le Fay, debido al trato incumplido entre ambos. Los Vengadores Oscuros partieron a ayudarle, y tras derrotar a Morgana, Osborn salvó a Muerte de una parálisis mística. Estableciendo un vínculo entre sus armaduras, lograron viajar al pasado y derrotar a Morgana en el pasado, reestableciendo Latveria en el presente. El Doctor Muerte fue encarcelado, y a la espera de juicio por crímenes contra la humanidad, cuando sus supuestos mentores, Masters of Doom, llegaron de otra dimensión. Uno de ellos, el Marqués de la Muerte le atacó al culparle por sus continuos fracasos contra sus enemigos, enviándole al pasado.
El Marqués fue derrotado por Reed Richards que se negó a matarle, su aprendiz decidió hacerlo revelando ser el propio Muerte, habiendo estado a su servicio durante siglos. Tras esto, Muerte aceptó la sugerencia de Loki, y comenzó a capturar Asgardianos para experimentar con ellos, esperando encontrar el secreto de su inmortalidad. Algunos de ellos fueron mutilados y convertidos en Cyborgs para ser enviados contra Balder y los suyos, pero Thor llegó para vengar la afrenta contra su gente.
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