LAYLA MILLER

NOMBRE EN INGLÉS
Layla Miller
NOMBRE VERDADERO
Layla Rose Miller
LUGAR DE NACIMIENTO
Ciudad de Nueva York, Nueva York, Estados Unidos
AFILIACIONES
Factor-X
OTROS ALIAS
Mariposa
FAMILIA
James Arthur Madrox (marido), Davey Miller (hijo)
PRIMERA APARICIÓN
House of M # 4 (Septiembre, 2005)
CREADORES
Brian Michael Bendis & Olivier Coipel
 
PODERES/HABILIDADES

PRIMERA APARICIÓN

Layla es una mutante nacida con una estructura genética que le concede habilidades especiales que la diferencian de los seres humanos. Posee el poder de resucitar a los muertos mediante el contacto físico, restaurando su consciencia y sanando sus heridas, pero no sus almas. Su poder únicamente funciona en los breves minutos posteriores a la defunción. Añadido a esto, cuando era una niña su mente recibió información a manos de su versión adulta, procedente del futuro, acerca de eventos de los siguientes ochenta años. El proceso de descarga de datos fue imperfecto y dejó lagunas en su mente, por lo que podía hacer predicciones imprecisas sobre el futuro, alegando “saber cosas”. Layla también fue entrenada por el Doctor Muerte en el uso de las artes místicas durante el transcurso de un año.
 
HISTORIA
Siendo una niña, Layla Miller fue enviada al Orfanato de St Joan en Nueva York, después de que sus padres fallecieran en un accidente de coche. Durante su estancia en el orfanato, los poderes mutantes de Layla se manifestaron. La niña desarrolló el poder de respirar fuego, resucitar pequeños animales, y dos cuernos surgieron de su cabeza. Esto provocó que el resto de los aterrorizados huérfanos la marginaran. Poco después, Layla recibió la visita de su versión adulta, procedente del futuro. La Layla adulta le explicó que estaba allí para cerrar un bucle temporal, y asegurar que los eventos futuros transcurrieran tal y como ella los recordaba. Con este propósito, la Layla adulta utilizó tecnología del futuro para implantar todos sus recuerdos y experiencias, que procedían de las ocho siguientes décadas, en la mente de la niña. La tecnología estaba dotada de un inhibidor cronal que permitió que la Layla niña conociera eventos futuros y tuviera una influencia sobre los mismos, sin provocar que la línea temporal se dividiera en realidades alternativas. De esta forma, Layla se convirtió en peón del destino, predeterminada para llevar a cabo eventos que recordaba, y así asegurarse que tenían lugar.

Cuando la Bruja Escarlata alteró la realidad, dando lugar a la Realidad-58163 de la Dinastía de M, los padres de Layla resucitaron. Layla fue la única que recordaba los eventos previos a la Dinastía de M, gracias a los recuerdos de su versión futura. Layla pudo restaurar los recuerdos del Doctor Extraño, aceptando la misión de restaurar la realidad, a pesar de que al hacerlo perdería su nueva e idílica vida. Layla también restauró los recuerdos de otros héroes, quienes se enfrentaron a la Bruja Escarlata para que restaurara la realidad. A pesar de tener éxito, la Bruja Escarlata también eliminó los poderes mutantes de la mayor parte de la población mutante, en lo que se dio a conocer como el Día-M. Después de que la realidad fuera restaurada, Layla acudió a Investigaciones Factor-X, una agencia de mutantes detectives. Ayudó a los miembros del equipo a investigar la compañía Investigaciones Singularidad y a su presidente Damian Tryp. Junto al equipo, Layla descubrió que Tryp estaba recreando el Virus del Legado, para impedir que los mutantes volvieran a crecer en número y destruyeran a la humanidad, dando lugar a la realidad de Tierra.6124. Sin embargo, la presencia de Layla fue un factor con el que Tryp no contaba, y Factor-X destruyó su compañía.

Sin embargo, las habilidades de Layla inquietaban al equipo, especialmente a su líder Jamie Madrox. Esto se debía a que Layla le había revelado que ambos se casarían en el futuro. Layla intentó provocar la muerte de Mercurio, declarando que era peligroso, pero fracasó porque poseía una porción del poder caótico de su hermana, la Bruja Escarlata. Esto le convertía en impredecible. Mercurio había perdido sus poderes durante el Día-M, pero los había recuperado mediante el uso de las Nieblas Terrígenas de los Inhumanos. A pesar de esto, Layla logró manipular eventos para que perdiera sus nuevos poderes. Tras esto, un socio de Tryp llamado Josef Huber, y conocido como el Aislacionista, comenzó a planear la masacre del resto de la población mutante del planeta. Consciente de la amenaza de Layla, Hubert contaba con Nicole, un simulacro robótico de una joven mutante que había perdido sus poderes. Hizo que Nicole se infiltrara en Factor-X para que su generador aleatorio de caos alterara las predicciones de Layla. Nicole intentó asesinarla, pero el inestable Mercurio le salvó la vida, asegurando que quería ser él quien acabara con su vida. Tras escapar de Mercurio, Layla advirtió a Factor-X sobre los planes de Huber y logró conseguir que Nicole acabara destruida al llevarla ante un tren en marcha. Layla comenzó a tener visiones terribles de un futuro, en el que tendría que permitir que la internaran en un campo de concentración mutante. Justo entonces, el nacimiento del primer bebé mutante, tras el Día-M, abrió la esperanza a la posibilidad de repoblar el planeta de mutantes. Madrox envió a dos duplicados a dos futuros alternativos, para comprobar si dicha repoblación había tenido éxito.

Layla se unió a uno de esos duplicados y viajó ochenta años en el futuro. Sin embargo, ambos descubrieron que los humanos y los mutantes se habían enfrentado en una gran guerra, y los mutantes habían acabado encarcelados en campos de concentración. Layla y el duplicado descubrieron que el bebé mutante había sido el catalizador de aquella guerra. Para que esa información regresara al pasado, Layla asesinó al duplicado para que fuera absorbido por el Madrox del presente. Layla quedó atrapada en el futuro, pero fue capaz de comunicarse con Madrox a través de la corriente temporal, para informarle de que Siryn esperaba un hijo suyo. Tras lograr escapar del campo de concentración, Layla se unió a Ruby Summers para iniciar una rebelión mutante contra el régimen antimutante. Al cumplir los veintiún años, Layla encontró el modo de traer a Madrox al futuro, aunque desde su perspectiva, solo había pasado un año desde que la joven había quedado aislada allí. Ambos lucharon en la Rebelión Summers, y comenzaron una relación. Los miembros de la rebelión recibieron la ayuda del Doctor Muerte, quien terminó por traicionarlos. Fue entonces cuando Layla volvió a manifestar su verdadero poder mutante, el de resucitar a aquellos que habían acabado de fallecer, aunque carentes de alma. Layla resucitó a su aliado Trevor Fitzroy, cuando fue asesinado por Cortex. Sin embargo, al carecer de alma, Fitzroy se convirtió en el villano que estaba destinado a ser. Tras derrotar a Cortex y sus Centinelas, Layla y Madrox fueron enviados de regreso al pasado, y Layla se visitó a sí misma en el orfanato para transmitirle todos sus recuerdos y experiencias, y así cerrar el bucle temporal.

Poco después, Layla viajó hasta Latveria para revelar sus conocimientos del futuro al Doctor Muerte, quien a cambio accedió a instruirla en las artes místicas durante un año. Cuando su compañero Fortachón fue herido de muerte, Layla utilizó sus poderes para devolverlo a la vida, pero carente de alma. Tiempo después, el equipo se enfrentó a Baño de Sangre en Los Ángeles, y el villano mató a Madrox durante el combate. En esta ocasión, Layla dudó acerca de resucitarlo carente de alma; mientras su compañero Estrella Rota acababa con Baño de Sangre decapitándolo. En un intento desesperado de sobrevivir, Baño de Sangre poseyó el cuerpo de Madrox, pero Layla utilizó sus nuevos conocimientos de las artes místicas para realizar un exorcismo. De esta forma, Baño de Sangre fue enviado al exilio en el Infierno. El alma de Madrox había sobrevivido, viajando a través del Multiverso. Layla decidió conservar su cuerpo en hielo, después de que un estudiante de medicina reparara el daño físico que había sufrido. El alma de Madrox logró regresar a su cuerpo y el joven volvió a la vida. Tras esta crisis, la relación entre Layla y Madrox se fortaleció. Cuando los miembros de Factor-X empezaron a separarse, Madrox le pidió a Layla que se casara con él, y la pareja celebró su boda en Las Vegas. Tras regresar de su luna de miel, la pareja ayudó a Factor-X a luchar contra los Señores del Infierno, pero Madrox fue transformado para adoptar la apariencia de un demonio. Layla lo encontró en Marrakech, Marruecos, donde una familia lo mantenía prisionero al pensar que se trataba de un djinn. Layla logró liberarlo y lo llevó a la antigua granja de su familia, donde le comunicó que estaba embarazada.

Madrox le pidió a su compañera Morrigan (Theresa Cassidy) que restaurara su forma física; y ella accedió a hacerlo. Después de esto, Madrox y Layla dejaron Factor-X y se retiraron a vivir en la granja, y tuvieron a un hijo llamado Davey. Pasado un tiempo, la Patrulla-X le pidió ayuda a Madrox, y Layla le animó a volver al servicio activo durante un tiempo. Sin embargo, Madrox acabó perdiendo la vida victima de la Peste-X provocada por las Nieblas Terrígenas de los Inhumanos. Cuando los mutantes de todo el planeta se establecieron en la nueva isla nación de Krakoa, Madrox volvió a la vida gracias a los nuevos Protocolos de Resurrección que habían creado. Layla permanecía en la granja y le pidió a su marido que los visitara para ver como su hijo Davey daba sus primeros pasos. Madrox estaba ocupado en Krakoa y envió a un duplicado, con la intención de absorberlo luego junto a sus recuerdos del momento. Sin embargo, el duplicado murió y dichos recuerdos se perdieron. Layla y Davey se trasladaron a Krakoa después de este incidente.

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